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Cómo transformar el problema en una solución
El agua es uno de los recursos más valiosos y abundantes en nuestro planeta, sin ella no sería posible la vida. Esto es así porque se trata de un recurso natural usado para múltiples necesidades del ser humano. El sector industrial, a pesar de ser uno de los más importantes en la economía mundial, también es uno de los más contaminantes de agua.
La contaminación de este elemento es uno de los mayores problemas a nivel mundial. Es un recurso natural abundante, sin embargo, también es limitado. Actualmente el 80% de las aguas residuales no son tratadas, por lo tanto, terminan afectando a los ecosistemas.
Afortunadamente, en los últimos años se han desarrollado tecnologías que permiten el tratamiento de estas para ser purificadas y reutilizadas para múltiples usos. Además, es posible generar energías limpias a través de estos desechos orgánicos, mediante tratamientos químicos y físicos.
¿Cómo se transforman los residuos contaminantes en energía verde?
El proceso a través del cual una sustancia orgánica se transforma en otra se llama fermentación. Mediante este proceso se produce un gas energético conocido como “biogas”, que puede ser usado para generar electricidad.
Las aguas residuales, con su materia orgánica contaminante, tienen gran cantidad de energía almacenada derivada de la descomposición de estos desechos. Otro de los elementos energéticos derivados del proceso es el hidrógeno, un elemento químico valioso que, con desarrollos científicos, puede ser transformado en energía sostenible.
Aguas residuales: la otra cara de la moneda
Las aguas contaminantes se definen como aquellas aguas que sufren modificaciones a tal punto de ser inutilizables en todos los ámbitos. La mayor de sus causas se deriva de los malos hábitos del ser humano, así como del poco interés mundial en buscar alternativas sostenibles para la reducción de la contaminación ambiental.
Cuando estas aguas no son tratadas correctamente, causan un daño en el ecosistema terrestre y marino. Igualmente son la causa de muchas enfermedades en animales y humanos.
Ante esta problemática global, gracias a los desarrollos tecnológicos que involucran procesos de ingeniería y química, es posible una solución. Por esta razón, las aguas residuales suponen ser un gran atractivo y solución, si estas son efectuadas a gran escala.
Realmente, los procesos de depuración del agua y generación de energía verde a través de biogas o hidrógeno verde, están siendo implementados por algunas industrias, y también, se encuentran en procesos de estudio y pruebas. El agua tratada y recuperada es reutilizada para: riego, procesos industriales, energía, recreativo, etc. Entonces, podríamos decir que este proceso de transformación y reutilización de los recursos involucra el desarrollo de una economía circular.
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Beneficios de las aguas residuales como fuente de energía renovable
Existen grandes beneficios de la producción de este tipo de energía alternativa:
- Reducir los gases contaminantes de la atmósfera.
- Abastecer de energía eléctrica sostenible.
- Reciclaje del agua para procesos industriales.
- Genera empleo fortaleciendo así la economía.
El tratamiento correcto y eficiente de las aguas residuales, es una alternativa factible y sostenible en el tiempo. Su gran potencial promete ser la solución para disminuir la contaminación y dependencia de la energía de combustibles fósiles.
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